Platón y autores de la época por encima

El paso del estudio de la "phisis" al estudio del "nomos" en las "polis" y como conseguir un estado justo, es el punto de inflexión de la forma de filosofía en la "Grecia de las Luces". Sócrates inaugura este momento, sin embargo, la inmensa mayoría de lo que conocemos de él, proviene de Platón.
Los presocráticos, estudiantes de la "phisis", percibían un mundo en el que las cosas eran objetos con propiedades escogidas de otras inmutables, imperecederas, universales... A estas otras cosas le llaman "arkhe", es decir, la esencia de las cosas, o mejor dicho, el ser de las cosas, o todo lo que es de las cosas que no son ni inmutables ni eternas...
Sócrates da un vuelco a esta búsqueda y la enfoca a un lugar mas abstracto, mas esencial y mas cultural en su camino hacia la realidad absoluta; el bien, la justicia, lo bello... Su trabajo compete a lo eterno en el presente y su presente es un "nomos" del cual formamos parte y no alcanzamos a comprender.
El bien, lo bello o la justicia son valores ligados a la sociedad y a los que aplica las propiedades del "arkhe" de los presocráticos.
A la búsqueda del conocimiento puro de estas realidades llega a través o gracias a la educación y al querer conocerlas cuyas respuestas podemos encontrar en nuestro interior mediante la razón. El paso previo a esta "educación Socrática" es la des educación. Llegar al punto en el que asumes tu ignorancia es esencia para empezar a conocer la verdadera esencia de la justicia, por ejemplo, o conocer lo que no lo es.
En este punto es donde Sócrates, no sin su particular ironía, dice aquello de "Solo se que no se nada". En este punto es donde se toma la decisión de comenzar a ascender una montaña cuya cima considera alcanzable. La contemplación de la belleza o cualquier otra realidad definitiva en si. En este punto es donde se forja una confrontación, donde la esperanza se ve herida por las flechas de la realidad. Realidad que irrumpe en nuestro mundo y nos transporta a la democracia ateniense. En este punto es donde otros que nunca faltan dicen -No hay mundo mas allá del océano, la tierra es plana! ¡Y si lo hubiera, nunca podríais llegar! ¡Y si llegarais, nunca podríais volver y traérnosla o llevarnos a nosotros!- A estos, se les llama sofistas. Y ven tan sencillo perforar las embarcaciones o convencernos de que no hay tierra prometida que lo hacen.
Han llegado al mismo punto que Sócrates pero no ven la cima que él cree ver. No creen que exista. Se dedican a utilizar este don dialéctico y a relativizarlo todo. Han de hacerlo porque no tienen una verdad a la que agarrarse y se sustentan en esta Atenas gracias a la democracia donde enseñan a confundir y a conducir a las masas con su don y verosimilitudes.
De ahí su odio mutuo.
Platón recoge las semillas de su maestro y de los presocraticos y las planta en su propio jardín.
De los presocraticos admite que todo es cambiante y que de lo cambiante sólo se puede adquirir opinión y nunca conocimiento, que hay dos niveles ontológicos, es decir, dos niveles de realidades. Que hay un dualismos antropológico que divide al ser humano en cuerpo y alma correspondientes a los dos mundos o realidades sensibles e inteligibles respectivamente y que existe un "arkhe" que Sócrates pretende transportar al "nomos" de las "polis" que es donde es necesario encontrar una idea y aplicarla por el bien común, que siempre es mas importante que el individual. Platón las llama ideas y son arquetipos de las realidades sensibles.
Sócrates le transmite su intelectualismo moral que está muy ligado a su teoría de las ideas. De aquí nace su mundo y su forma de entender el conocimiento.
La ascensión por los niveles de realidad hasta la contemplación del ser. Su interés por el estudio de lo que la sociedad nos provoca ver. También comparte con Sócrates un "desprecio" por los sofistas, quizá comparten un amor maestro-discípulo y quien sabe si un oscuro reconocimiento en los sofistas.

29/10/2009